Normalmente, cuando lavas el pelo rizado después de alisarlo, tus rizos vuelven a la vida inmediatamente. Pero, ¿qué ocurre cuando necesitan un poco más de coacción?
¿Puedes recuperar tu pelo rizado después de alisarlo demasiado? ¿O te quedas con el pelo rizado dañado o con el pelo liso permanente?
Si tienes dificultades para conseguir que tu pelo rizado vuelva a serlo, ¡sigue leyendo! En este artículo, te guiaremos por algunas formas diferentes de conseguir que tus rizos vuelvan a su sitio y te daremos algunos consejos para prevenir el daño por calor en primer lugar.
Así es como se recupera el pelo rizado después de haberlo alisado demasiado
Alisar el pelo puede dañarlo con el calor y quitarle el rebote a tus rizos. Por suerte, hay muchas posibilidades de que no te quedes con los mechones sin vida para siempre. Aquí tienes unos cuantos métodos diferentes que puedes utilizar para que tus rizos vuelvan a serlo.
Prueba una mascarilla de arcilla
Muchas personas naturales amantes del calor han conseguido recuperar sus rizos naturales con una mascarilla de arcilla desintoxicante. Además de eliminar las toxinas, la arcilla de bentonita contiene una variedad de nutrientes que fortalecen y reparan tus hebras.
Como resultado, puede que descubras que tu patrón de rizos se ha reactivado después de una sola mascarilla de arcilla. Para empezar, mezcla media taza de arcilla de bentonita con media taza de agua en un bol no metálico.
Luego, mezcla ¼ de taza de vinagre de sidra de manzana, una cucharada de tu aceite capilar favorito y unas gotas de aceite esencial. Mezcla bien y aplica la mezcla de arcilla a tus mechones desde la raíz hasta las puntas.
Cúbrete el pelo con un gorro de ducha y espera 20 minutos antes de aclararlo bien. Las partículas de arcilla son diminutas, así que tómate tu tiempo al aclarar el pelo.
Una vez que estés segura de haber eliminado toda la arcilla, aplica tu acondicionador profundo favorito para restaurar la hidratación y la elasticidad de tu cabello.
Puedes utilizar este tratamiento una vez a la semana hasta que vuelvan tus rizos. Ten en cuenta que la arcilla es extremadamente secante. Así que asegúrate de aplicar un acondicionador profundo después de cada tratamiento.
Adopta productos ricos en proteínas
Si observas el cabello dañado por el calor con un microscopio, verás una gran cantidad de agujeros y huecos a lo largo de su superficie. El calor (especialmente la exposición repetida al calor) desgasta la integridad estructural de tus mechones, haciendo que tu pelo se debilite, se encrespe y se afloje.
Los productos ricos en proteínas ayudan a restaurar tu cabello y a rellenar los puntos débiles de la superficie de cada mechón. Pero ten cuidado de no aplicar proteínas con demasiada frecuencia.
Un exceso de proteínas puede tener el efecto contrario y dejar tus mechones aún más secos y quebradizos. Intenta utilizar productos ricos en proteínas una vez a la semana o menos y reduce su uso una vez que tu cabello vuelva a la normalidad.
Ten en cuenta que las proteínas suelen aparecer con un nombre diferente. Algunos de los otros ingredientes en los que debes fijarte son:
- Aminoácidos
- Queratina
- Colágeno hidrolizado
- Harina de avena
- Agua de arroz
Hazte un recorte o un corte de pelo
Por desgracia, los daños graves por el calor son irreversibles. Al ser las partes más antiguas de tu pelo, las puntas son las más propensas a dañarse. Un buen recorte o corte de pelo elimina este daño y evita que se desplace hacia arriba, hacia las partes más sanas de tu cabello.
También eliminará parte del peso de tu pelo, por lo que tus rizos serán más voluminosos y elásticos. Tras el recorte inicial, mantén el daño a raya recortando tu pelo rizado una vez cada 6 u 8 semanas.
Aplica un tratamiento de acondicionamiento profundo
Una de las mejores maneras de recuperar la salud de tu pelo es asegurarte de que tiene mucha hidratación. Los acondicionadores profundos restauran eficazmente la elasticidad de tu cabello y favorecen el retorno de tus rizos naturales.
Para dar a tu pelo un impulso de hidratación muy necesario, utiliza un champú hidratante y agua caliente para lavarte el pelo. Al terminar, aplica un tratamiento de acondicionamiento profundo nutritivo o una mascarilla de la raíz a las puntas.
Déjalo reposar hasta 30 minutos antes de aclararlo bien con agua fría o templada.
Deja que el pelo se seque al aire y péinalo como de costumbre. Repite este proceso dos veces por semana hasta que tu pelo muestre signos de mejora. Después, reduce los tratamientos de acondicionamiento profundo a una vez por semana para mantener unos rizos sanos.
Evita el calor y los daños químicos
Si tienes problemas para recuperar tus rizos, lo último que debes hacer es dañarlos aún más. Intenta no utilizar herramientas calientes (por ejemplo, plancha, secador) ni tratamientos químicos perjudiciales (por ejemplo, alisador) hasta que tu pelo haya empezado a mejorar.
En su lugar, adopta métodos de peinado sin calor y da a tus mechones mucho cariño. De este modo, disminuyen las posibilidades de sufrir daños graves e irreversibles y tus rizos tienen tiempo para recuperarse.
Cómo prevenir el daño por calor al alisar tus rizos
La forma más fácil de asegurar que tus rizos vuelvan a crecer después de alisarlos es alisar tu pelo de la forma correcta. He aquí algunos de nuestros principales consejos para prevenir el daño por calor y mantener tus rizos a salvo.
Mantén la plancha en un ajuste de calor más bajo
Las altas temperaturas son una de las principales causas de los rizos dañados por el calor. Aunque las altas temperaturas pueden darte resultados brillantes y elegantes, también pueden cocer tus mechones.
Por suerte, la mayoría de las planchas tienen un pequeño mando o botón que te permite ajustar la temperatura. Cuando te alises el pelo, utiliza la temperatura más baja que puedas.
Eso te ayudará a evitar el daño por calor y a mantener tus rizos a salvo.
Invierte en las herramientas adecuadas
Cuando se trata de minimizar el daño por calor, utilizar las herramientas adecuadas marcará la diferencia. Las planchas de baja calidad pueden calentar de forma desigual o desgarrar tu pelo.
También pueden tener ajustes de calor defectuosos y calentarse mucho más de lo previsto.
Para mantener tus rizos a salvo, asegúrate de invertir en una plancha de alta calidad. De este modo, tu plancha se deslizará por tus mechones, limitando la cantidad de calor que tienes que utilizar en ellos.
Asegúrate de que la plancha se mueve constantemente
Otra forma de dañar los rizos es mantener la plancha en una sección durante demasiado tiempo. Cuando te alises el pelo, intenta mantener la plancha en movimiento en todo momento. Evita dejarla en una zona durante más de 3 segundos seguidos, y así conseguirás que el daño sea mínimo.
Intenta no hacer varias pasadas
Cada vez que arrastras la plancha por una sección de cabello, eso cuenta como una pasada. Hacer numerosas pasadas en una zona aumenta drásticamente la probabilidad de que dañes tus mechones.
Evita repasar cada sección más de una vez, y en su lugar, intenta mejorar tu técnica de alisado. Si tienes que volver a pasar por una zona, deja que se enfríe durante unos minutos antes de volver a aplicar calor.
Sustituye la plancha con frecuencia
Aunque la mayoría de la gente utiliza la plancha hasta que deja de funcionar, deberías sustituirla con mucha más frecuencia. Con el tiempo, los componentes eléctricos pueden quemarse o degradarse.
Además, el revestimiento protector que protege tu pelo de las placas metálicas calientes puede desgastarse y exponer tus mechones a temperaturas abrasadoras. Para mantener tu pelo a salvo, procura sustituir la plancha después de 2 a 4 años.
Utiliza un protector térmico de alta calidad
Un protector térmico de buena calidad es tu primera línea de defensa contra el calor y sus daños. Los protectores térmicos fortalecen tus mechones y crean una barrera entre tu pelo y el calor de la plancha.
Para obtener los mejores resultados, aplica un protector térmico sobre el cabello húmedo y tómate tu tiempo para asegurarte de que tus mechones están cubiertos de manera uniforme.
La prevención es la mejor medicina, así que asegúrate de proteger tus mechones antes de alisarlos. Y no te asustes si tus rizos naturales no vuelven enseguida.
A veces necesitan un poco de tiempo, así que sigue dándoles mucha hidratación y cariño.
Dicho esto, esperamos que una de las soluciones mencionadas en este artículo sea precisamente lo que necesitas para devolver la vida a tus rizos después de alisarlos.